¿Qué es la ansiedad?

Sentir ansiedad de modo ocasional es una parte normal de la vida. Sin embargo, las personas con trastornos de ansiedad con frecuencia tienen preocupaciones y miedos intensos, excesivos y persistentes sobre situaciones diarias. Con frecuencia, en los trastornos de ansiedad se dan episodios repetidos de sentimientos repentinos de ansiedad intensa y miedo o terror que alcanzan un máximo en una cuestión de minutos (ataques de pánico).

Estos sentimientos de ansiedad y pánico interfieren con las actividades diarias, son difíciles de controlar, son desproporcionados en comparación con el peligro real y pueden durar un largo tiempo. Con el propósito de prevenir estos sentimientos, puede suceder que evites ciertos lugares o situaciones. Los síntomas pueden empezar en la infancia o la adolescencia y continuar hasta la edad adulta.

Algunos ejemplos del trastorno de ansiedad son: trastorno de ansiedad generalizada, trastorno de ansiedad social (fobia social), fobias específicas y trastorno de ansiedad por separación. Puedes tener más de un trastorno de ansiedad. A veces, la ansiedad surge de una enfermedad que requiere tratamiento.

Síntomas: 

Los signos y síntomas de la ansiedad más comunes incluyen los siguientes:

• Sensación de nerviosismo, agitación o tensión

• Sensación de peligro inminente, pánico o catástrofe

• Aumento del ritmo cardíaco

• Respiración acelerada (hiperventilación)

• Sudoración

• Temblores

• Sensación de debilidad o cansancio

• Problemas para concentrarse o para pensar en otra cosa que no sea la preocupación actual

• Tener problemas para conciliar el sueño

• Padecer problemas gastrointestinales (GI)

• Tener dificultades para controlar las preocupaciones

• Tener la necesidad de evitar las situaciones que generan ansiedad 

Si te sientes ansioso, bebe alguna de estas infusiones. Te harán bien. Quizás las tengas en la despensa de tu casa o, en todo caso, será fácil conseguirlas en la farmacia.

A continuación te presentamos 4 infusiones que te ayudarán a calmar la ansiedad.

Manzanilla

Se conoce más como una bebida para mejorar la digestión pero también es excelente como relajante. Además, es una de las infusiones que ayuda contra la hiperactividad y optimiza el sueño.

Su poder se concentra en las flores. Su nombre científico es Chamaemelum nobile por lo que también se le llama «camomila».

Es originaria de Europa y sus propiedades se conocen desde la edad media. Para prepararla a partir de sus flores (de venta en farmacias y tiendas naturistas) se debe poner agua a hervir. Cuando esté en ebullición, apagar el agua y colocar las flores a infusionar 5 minutos. Colar, endulzar al gusto y beber.

La proporción es de una cucharada de flores por cada taza de agua, aproximadamente.

 Tilo

Se conoce también como tilia o tila y su nombre científico es Tilia platyphyllos es ideal para relajarse, calmar los nervios y conciliar el sueño. Se encuentra en farmacias y cualquier supermercado. Se prepara como cualquier infusión, en una proporción de dos cucharadas de tilo por cada litro de agua hirviendo. Se deja infusionar 5 minutos, se cuela y se bebe. Se puede endulzar al gusto.

Orégano

Casi todo el mundo conoce los usos en la cocina de la hierba Origanum vulgare pero su infusión ayuda a calmar la ansiedad. Se puede hacer con la hierba fresca, las hojitas secas e incluso en polvo. Se hierve agua, se infusiona el orégano 5 minutos, se cuela y se bebe. Si se hace con el polvo, hay que colocar una base delgada de algodón en el colador para filtrar bien el polvo. Endulzar y beber.

Valeriana

La Valeriana officinalis es la más conocida para relajarse porque es la más potente. Tiene propiedades sedantes. Se vende en farmacias. Las hojas secas de valeriana es lo que más se utiliza para preparar la infusión, en proporción de una cucharada por litro de agua. También puede utilizarse la raíz aunque en Venezuela no son fáciles de conseguir. En ese caso, la raíz debe dejarse reposar en un vaso de agua toda la noche. Siempre debe colarse y endulzarse porque es amarga.

Prueba  alguno de estos tea y relájate, recuerda que si tus síntomas se agravan no olvides visitar a un especialista de la salud.